te dije: tú eres la manifestación del amor de dios,
eres la amadanada hecha carne, hueso, corazón y espíritu.
eres la amadanada hecha carne, hueso, corazón y espíritu.

quién iba a imaginar que llegaríamos a separarnos.
siempre he querido que vengas por aca, que entiendas un poco más quien soy.
la materialización no es la totalidad, o será que aún no entiendo eso y me estoy arriesgando a dejarte ir amada ya no nada.
si eres un regalo de ti misma, puedo evocarte y apreceras tú y me dejarás ver, entre los filos de tus espejos, lo que siempre ame de aquí, lo que traigo en mi propia historía y sé quedará después de esta existencia. te amo de eso no hay duda.
¿podremos estar juntos?
quiero comprender también, lo que me dijiste esa día tendidos en la cama como trapos humedos en una piedra del rio:
yo quiero que tú seas mi universo.